Varios jugadores de la NFL desafiaron al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, con nuevas protestas al himno nacional durante la primera jornada de pretemporada del campeonato.
Arrodillados, alzando el puño, sentados en los banquillos o esperando en los vestidores, los jugadores mantuvieron unas protestas, que el presidente Donald Trump aborrece, en oposición a la injusticia social y la violencia policial contra los afroamericanos que estallaron en 2016.
Según medios estadunidenses, en el partido que enfrentó a los Delfines de Miami con los Bucaneros de Tampa Bay, los receptores locales Kenny Stills y Albert Wilson se arrodillaron, mientras que el defensor Robert Quinn alzó su puño.
En Filadelfia, el capitán de las Águilas, vigente campeón de la NFL, Malcolm Jenkins, alzó su puño, lo mismo que el esquinero De’Vante Bausby, mientras que el defensor Michael Bennett se quedó en el banquillo en el partido contra los Acereros de Pittsburg.
Muchos jugadores de los Jaguares de Jacksonville, como Jalen Ramsey, Telvin Smith, Leonard Fournette y T.J. Yeldon, no salieron al campo durante la reproducción del himno en el partido que les enfrentó con los Santos de Nueva Orleans.
En el partido entre los Cafés de Cleveland y los Gigantes de Nueva York, una decena de jugadores del conjunto neoyorquino se arrodillaron durante el himno.
Con sus protestas, los jugadores no solo desafiaron a Trump sino también a la NFL, que estrena esta temporada un nuevo reglamento para multar a los equipos cuyos integrantes se arrodillen durante el himno nacional, aunque sí se les permite quedarse en el vestuario hasta el inicio del partido.
Trump, que lleva meses enfrentado con los jugadores, celebró en mayo la aprobación del nuevo reglamento y dijo que los deportistas que no se pongan en pie durante el himno “probablemente no deberían estar en el país”.
Fuente: https://www.excelsior.com.mx