S&P bajó este lunes la perspectiva de la calificación de Petróleos Mexicanos (Pemex) a negativa desde estable.
“La perspectiva negativa de la calificación en escala global de Pemex refleja la del soberano y nuestra opinión de que la estrecha relación entre la empresa y el Gobierno federal se mantendrá sin cambio durante los siguientes años”, dijo S&P en un comunicado.
La semana pasada, la calificadora bajó la perspectiva de la calificación de México de estable a negativa, citando menores previsiones de crecimiento económico.
La agencia mantuvo en ‘BBB+’ y ‘A-‘ las calificaciones de la petrolera en moneda extranjera y local.
Esto, indicó, derivado de “la expectativa de una probabilidad casi cierta de apoyo extraordinario de parte del Gobierno a la empresa, ante un escenario de estrés financiero”.
Aunque dijo que es insuficiente el plan del Gobierno para apuntalar a la compañía, cuyas pérdidas en 2018 sumaron 7 mil 551 millones de dólares.
“Consideramos que el plan financiero para restaurar los fundamentos crediticios de la petrolera es insuficiente respecto de las necesidades multianuales de inversión de capital”.
S&P también dijo que la empresa estatal está expuesta a decisiones políticas que podrían entrar en conflicto con sus objetivos financieros y de negocio.
El presidente Andrés Manuel López Obrador expresó a mediados de febrero su respaldo a Pemex, y que la empresa cumplirá en tiempo y forma con todas sus obligaciones financieras.
López Obrador anunció un plan para apoyar a la petrolera con el equivalente a 3 mil 900 millones de dólares, después de que Fitch redujo la calificación crediticia de Pemex y mantuvo la perspectiva en negativa.
La Secretaría de Hacienda dijo que no planeaba emitir comentarios sobre el anuncio de la calificadora.
Fuente: AGENCIAS