San Luis Potosí SLP.-El Gobernador electo, José Ricardo Gallardo Cardona, declaró que las condiciones en las que recibirá la Secretaría de Seguridad Pública son preocupantes por las condiciones del personal, pues “no dejan avanzar”, dado que de los 4 mil trabajadores, 3 mil son administrativos que fueron colocados en sus puestos por conveniencia.
“Era tu compadre, lo sacabas de patrullero y lo metías a una oficina para basificarlo y sindicalizarlo, cosa que está prohibida, los policías no pueden ser sindicalizados son personal de confianza cien por ciento”, afirmó Gallardo Cardona.
Agregó que entonces, cuando una administración gubernamental, empieza a quitar elementos de las calles con la única finalidad de basificarlos o sindicalizarlos, salen de su rol de cuidar las calles para ingresarlos en una dinámica burocrática.
“Se está perdiendo la batalla con la delincuencia porque tenemos mil policías activos para todo el Estado, es una burla, pero le pagaste la nómina a más de cuatro mil, esa es la parte que el potosino debe de entender sobre cómo vamos a agarrar al estado”, afirmó.
Agregó el Gobernador electo que en su administración se buscarán los mecanismos para reforzar la seguridad en todo el Estado con lo que se tiene, pues los policías tienen que salir a la calle a trabajar y a garantizar la paz y la tranquilidad de los potosinos.
“Si se supone que son policías de carreras, pues qué están haciendo en un escritorio, yo sé que debe de haber gente en escritorio pero no puede haber tal disparidad. Tenemos que hacer un cambio de fondo y el reto es que sea en un año, por eso estamos construyendo en esta transición un tema ordenado”.
Como parte de este cambio de fondo, Gallardo Cardona afirmó que desde un inicio se sentarán las bases para crear una guardia civil, qué va a ser totalmente distinta a la Policía Estatal: “vamos a eliminar esa Policía Metropolitana que ya no sirve, y no quiere decir que vayamos a eliminar al elemento, sino que va a haber una migración a la nueva policía”.
Profundizó en el sentido de que habrá capacitación militar, de reacción, y en Derechos Humanos, para generar condiciones óptimas para la seguridad pública del Estado, y en esta dinámica, el personal administrativo que esté apto para salir a las calles deberá hacerlo mediante el proceso de migración al nuevo sistema policial.
