La compra de terrenos para el nuevo trazo del Tren Maya entre Playa del Carmen y Tulum costará alrededor de mil millones de pesos, reveló a REFORMA el director del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), Rogelio Jiménez Pons.
En entrevista, el funcionario comentó que el plan es adquirir terrenos a lo largo de unos 43 kilómetros junto a la carretera 307, con la finalidad de reducir las afectaciones por obras “inducidas”, generar ahorros derivados de la mitigación de dificultades técnico-operativas y acelerar la construcción.
“No es mucho en comparación con lo que nos vamos a ahorrar, porque nos ahorramos muchos movimientos de las obras inducidas, ya no tendríamos que andar moviendo los postes de media tensión, ni tendríamos que andar reponiendo carreteras”, explicó.
“Entonces, nos sale hasta mucho mejor económicamente, estamos hablando de alrededor de poco más de mil millones de pesos lo que constarían los derechos de vía, pero nos estamos ahorrando más de 3 mil, 5 mil millones tranquilamente”.
Jiménez Pons aseveró que las asociaciones de hoteleros de toda la Riviera Maya apoyan este plan y están dispuestos a venderle al Gobierno federal terrenos para un nuevo derecho de vía, ya que conocen las ventajas y buscan mitigar los efectos de la obra.
“Es donde más sensible hay inversiones turísticas, a las cuales cualquier problema de tránsito sí puede afectar en términos de su rendimiento, son miles de gentes las que transitan diariamente por aquí. Muchos (de los terrenos) son de ellos mismos o de gente conocida, y la reacción ha sido muy positiva”, comentó.
“El trabajo se viene dando en coordinación, se está dando en los hechos el apoyo del sector de turismo a efecto de apoyar la obra con gestiones, con apoyarnos en vendernos el derecho de vía y yo creo que va bien la gestión”.
El funcionario subrayó que el nuevo trazo del Tren -en el denominado tramo 5 sur, a cargo del consorcio Grupo México y Acciona Infraestructuras- no afectará a los hoteleros, ya que correrá paralelo a la carretera, pero al poniente de la misma, es decir, del otro lado de los hoteles de playa.
“Estará lejos de sus entradas, lejos de sus instalaciones y es lo que quieren los hoteleros. El Gobierno federal es poseedor de los derechos de vía de la carretera, ahí podemos hacer las obras de infraestructura, pero estas sobras, como tenemos que hacer muchas obras inducidas, que son mover líneas de alta tensión, mover cables, ductos, mover cosa y media que hay aquí, implicaba muchos efectos sobre el tránsito”, abundó.
“Entonces, el sector turismo alertó y dijimos: ‘sí, pero ese es nuestro derecho de vía, lo tenemos ahí, si ustedes nos ayudan a conseguir otro derecho de vía, a comprar el derecho de vía de ustedes, con mucho gusto nos vamos por otro lado, y ellos aceptaron en principio eso y en eso estamos”.
A ras de piso
El titular del Fonatur aclaró que de Tulum a Playa del Carmen el Tren correrá a ras de piso. Precisó que sólo se construirá un viaducto elevado para que cruce la ciudad de Playa del Carmen y se conecte con el tramo 5 norte, que va de este destino turístico a Cancún y cuya construcción está a cargo de la Sedena.
“A nivel piso, ya no hace falta hacerlo elevado, eso siempre se ha planteado, de Playa del Carmen a Tulum siempre iba en medio de la carretera, pero a nivel de la misma. Aquí lo que estamos buscando de la mano del sector privado es que mitiguemos los efectos de la construcción”, reiteró.
“Indudablemente, son muy fuertes porque son obras muy grandes, estamos hablando de miles de piezas que se deben transportar, camiones. La obra a final de cuentas va beneficiar mucho, pero el chiste es mitigar los efectos durante la construcción, que son dos años”.