Este 23 de agosto se cumplen 20 días o 471 horas desde que 10 mineros carboneros quedaron atrapados en el pozo El Pinabete, en Sabinas, Coahuila. Pese a los trabajos sin descanso de miembros de los tres niveles de Gobierno los logros han sido pocos y la desesperación de los familiares mucha.
Incluso, a pesar rezos que les han dedicado, día tras día los seres queridos de los mineros han comenzado a resignarse a no volver a verlos con vida. Sobre todo porque cada avance ha significado un retroceso por el agua.
Desde que se dieron a conocer los hechos, los familiares se mantienen en la zona en donde se realizan labores las 24 horas del día. Además de barrenar el agua se ha inyectado cemento en la mina Conchas Norte para impedir el flujo de agua a El Pinabete.
Debido a la complicada situación en la que se encuentran los familiares de los afectados, tras una reunión que tuvieron con el representante legal del patrón y de la Procuraduría Federal de la Defensa del Trabajo (PROFEDET) se acordó, según datos de Excélsior, que estos recibirán un pago de 12 mil pesos semanales hasta que rescaten a los mineros.
Y es que la salvación ha sido difícil, pues el propio presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) confesó en la conferencia mañanera del lunes que no se había podido efectuar, de nueva cuenta, el rescate porque en esta ocasión se abrió un nuevo boquete en la mina vecina.
“Lamentablemente todavía no hemos podido rescatar a los mineros de Sabinas, Coahuila. Ya se iba avanzando, pero se tuvo la mala suerte de que se abrió otro boquete de la mina vecina, que está inundada, y volvieron a subir los niveles de agua”, dijo.
Añadió que a petición de los familiares se ha pedido la opinión de especialistas de Alemania y de Estados Unidos, quienes han coincidido en que los trabajos que la Sedena, la Guardia Nacional, CFE, Conagua, entre otras dependencias son lo correcto y que van a paso lento porque es un “asunto complicado”.
Entre las últimas acciones reportadas por el Gobierno sobre el rescate está la perforación de tres barrenos más entre la mina de Conchas Norte y Pinabete, en donde se busca la evidencia de los puntos donde se va a llevar a cabo el sellado. Por el momento se encuentran 13 bombas activas ubicadas en los pozos y en los barrenos con una potencia total de 930 caballos, de acuerdo con Laura Velázquez Alzúa, titular de la Coordinación Nacional de Protección Civil.
Aunque según el Gobierno los familiares de los mineros, con quienes hablan dos veces al día, están tranquilos al ver los trabajos que se realizan en la zona, una de las afectadas dijo para El Universal que su “corazón está partido” al pensar que posiblemente su familiar ya murió.
“Mi corazón lo tengo partido, a veces ya no puedo llorar. Sería un milagro que estuvieran con vida, porque simplemente ¿quién va a resistir? A lo mejor sin comer sí, pero sin agua cómo va a resistir y con esa lentitud, menos. Mi miedo es que los dejen ahí”, apuntó una mujer llamada Magdalena Montelongo.
Durante este 23 de agosto, día en que se cumplen 20 días, nuevamente Velázquez Alzúa dará su actualización; sin embargo, las probabilidades de que informe que ya han sido rescatados los 10 mineros es baja.