El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) reconoció ayer que ayudar a los pobres también es un asunto de estrategia política.
A pesar de que es un hecho el uso político que se da a los programas sociales, es la primera ocasión en que el mandatario reconoció que se trata de una estrategia y que apoyar a los pobres es “ir a la segura”, pues las personas beneficiadas defenderán, cuando sea necesario, a la llamada Cuarta Transformación.
“Ayudando a los pobres va uno a la segura, porque ya sabe que cuando se necesite defender, en este caso la transformación, se cuenta con el apoyo de ellos”.
“No así con sectores de clase media, ni con los de arriba, ni con los medios, ni con la intelectualidad. Entonces, no es un asunto personal, es un asunto de estrategia política”, planteó.
El presidente dijo que, para transformar, se necesita una “base social” y nuevamente rechazó que haya polarización en el país. “No se polariza, se politiza”, enfatizó.
El pasado 7 de diciembre, el jefe del Ejecutivo aseveró que los pobres son leales, no así los “potentados”.
Al término de su contramarcha por Paseo de la Reforma, el mandatario reivindicó su política de dar preferencia a los pobres y habló de la “recompensa” política que lleva implícita dicha estrategia.