El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), retomó las labores de supervisión del Tren Maya en Quintana Roo, y durante su visita al estado fue cuestionado sobre el daño a la cueva Dama Blanca. La organización no gubernamental Sélvame del Tren insistió en que la cueva sí fue afectada, incluso después de que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) emitiera un posicionamiento en el que lo negaba.
Este sábado, AMLO se deslindó de la situación en la cueva Dama Blanca y acusó a las organizaciones de la sociedad civil que se manifiestan contra el Tren Maya de ser pseudoambientalistas financiados por inversionistas extranjeros “que buscan despojar a los mexicanos de su patrimonio”.
La organización Sélvame del Tren aseguró que la dolina fue rellenada en un 50%, lo cual afectó su función de recargar y proteger el acuífero. Asimismo, hicieron énfasis en que Dama Blanca no solo tiene valor geológico sino arqueológico y señalaron que entre los vestigios que fueron encontrados en la cueva están basamentos que posiblemente están asociados a las deidades del inframundo y del agua.
El INAH afirmó que la caverna está intacta y que su entrada está acordonada mientras se analizan las medidas pertinentes para salvaguardarla. También afirmó que la riqueza arqueológica de la cueva Dama Blanca fue reconocida desde 2022 en el Proyecto de Salvamento Arqueológico Tren Maya.
El Tren Maya ha enfrentado 50 amparos contra los 7 tramos contemplados en el proyecto que, no obstante, se prevé entre en funcionamiento en diciembre de este año pese a las críticas. En diversas ocasiones AMLO ha mencionado que la fecha de inauguración de esta megaobra insignia de su gobierno es inamovible.
