El huracán ‘Lidia’ de categoría 4 ha tocado tierra en la localidad de ‘Las Peñitas’, en Tomatlán, Jalisco. Con vientos máximos sostenidos de 220 kilómetros por hora y rachas de viento de 260 kilómetros por hora, este fenómeno climático ha dejado una huella de destrucción en su camino.
Las autoridades han cancelado clases en comunidades costeras, preparándose para el impacto de ‘Lidia’ un día después de que la tormenta tropical ‘Max’ azotara la costa sur del Pacífico. ‘Max’ dejó su marca al arrasar parte de una carretera costera en Guerrero, a cientos de kilómetros de distancia.
Los estados más afectados por ‘Lidia’ son Jalisco, Colima y Nayarit, donde se esperan lluvias puntuales extraordinarias. Además, se pronostican lluvias torrenciales en Michoacán y Guerrero, e intensas en Sinaloa, Durango, Baja California Sur, Zacatecas, Aguascalientes y Guanajuato.
En Nayarit, la Bahía de Banderas, en la zona sur del estado, enfrenta una amenaza considerable, lo que ha llevado a la asignación de un fondo de 30 millones de pesos para hacer frente a las posibles afectaciones. El gobernador Miguel Ángel Navarro Quintero anunció este recurso en una sesión del Consejo Estatal de Protección Civil.
Desde las 12 del día, se suspendieron todas las actividades oficiales en los 20 municipios del estado de Nayarit. Aunque en Bahía de Banderas, San Blas y Compostela el cierre de comercios y servicios fue más notorio ante la inminencia del huracán, otras localidades, como Acaponeta, Tecuala, Rosamorada, Tuxpan, Santiago Ixcuintla y Huajicori, también están en alerta debido a la crecida de los ríos, que históricamente ha inundado las zonas bajas y provocado grandes pérdidas en la agricultura y viviendas durante la temporada de huracanes.