En un acto de profundo respeto y solidaridad, personas en situación de movilidad y miembros de la Coalición Pro Defensa del Migrante se reunieron este jueves en el lado mexicano del muro fronterizo con Estados Unidos para rendir homenaje a los miles de migrantes que han perdido la vida en busca de un futuro mejor. A escasos tres kilómetros del puerto fronterizo de San Ysidro, activistas y migrantes se unieron en una demanda común: garantizar la seguridad y dignidad para quienes llegan al norteño estado mexicano de Baja California en busca de protección internacional y mejores oportunidades.
El padre Patricio Murphy, director de la Casa del Migrante de Tijuana, lideró la emotiva ceremonia. Como es tradición cada 2 de noviembre, se erigieron altares y se rezó por los difuntos. En esta ocasión, se rindió homenaje a quienes perdieron la vida en el arduo camino de la migración. “Pusimos este altar para recordarlos y rezar por sus almas, y rezamos por sus familias. Muchos vienen con el sueño americano, pero ese sueño a veces se convierte en la pesadilla de morir en la frontera, y por eso les estamos rezando”, expresó el padre Murphy.
Según datos proporcionados por la Coalición Pro Defensa del Migrante, recopilados a partir de informes de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), desde el inicio del Operativo Guardián en 1994 hasta el 30 de junio de 2023, se han registrado un total de nueve mil 898 muertes de migrantes en toda la frontera norte de México. A estas cifras se suman dos mil 544 personas migrantes fallecidas en calidad de no identificadas en cementerios de Estados Unidos, lo que da un registro total de 12 mil 442 personas que han perdido la vida intentando cruzar la frontera a través del muro, el mar y el desierto.
El padre Murphy destacó que los intentos de cruce y las muertes han ido en aumento en las últimas semanas, en parte debido a la creciente desesperación de las personas y a la restricción de los caminos legales para ingresar a los Estados Unidos. En este contexto, el activista enfatizó la importancia de que México y Estados Unidos busquen acuerdos y soluciones binacionales para abordar este desafío.
A pesar de los esfuerzos del presidente Andrés Manuel López Obrador para abordar el tema de la migración a nivel internacional, el padre Murphy instó a una mayor colaboración entre México y Estados Unidos y a evitar que México asuma la carga de la gestión de la migración a cambio de fondos. “El fenómeno de la migración es un fenómeno internacional, y se deben buscar soluciones desde esa perspectiva. México debe buscar soluciones que no impliquen encarcelar a las personas o enviarlas de vuelta a sus hogares, ya que esto no beneficiará al mundo”, argumentó.
Félix Ramírez, un migrante originario de Querétaro que lleva ocho días en Tijuana, compartió su experiencia. A pesar de la violencia en su lugar de origen, su principal motivación para dejar su hogar fue la esperanza de encontrar el sueño americano y mejorar la economía de su familia. Hizo un llamado a los migrantes para buscar formas legales de cruzar la frontera y evitar los peligros, como el secuestro y la pérdida de vidas, que a menudo enfrentan aquellos que eligen la ruta irregular.
En medio de un contexto desafiante y en constante evolución, la ofrenda y el rezo en la frontera mexicana se mantienen como un recordatorio conmovedor de los sacrificios y desafíos que enfrentan los migrantes en su búsqueda de una vida mejor.
