En una respuesta contundente al desplome educativo evidenciado en los resultados de la prueba PISA, los rectores de universidades públicas de México han elevado su voz exigiendo al gobierno y a la Cámara de Diputados que aseguren “presupuestos suficientes y oportunos” para una planificación educativa a mediano y largo plazo.
El secretario general de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), Luis Armando González, alertó sobre la falta de recursos necesarios en las universidades públicas para preparar de manera adecuada a los nuevos profesionistas en respuesta a los resultados del Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA) de la OCDE.
Durante la entrega de estados financieros de 2022 ante la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación en la Cámara de Diputados, González subrayó la necesidad de superar el “terrorismo fiscal” y abogó por un “ambiente presupuestalmente menos adverso”.
Dante Salgado, rector de la Universidad Autónoma de Baja California Sur, hizo un llamado a los diputados y al Ejecutivo federal para mejorar la educación mediante la elaboración de “presupuestos multianuales para una planeación educativa de mediano y largo plazo”. Enfatizó que las universidades no pueden planear de un año para otro y que cualquier transformación educativa requiere de una atención sostenida.
Santos Guzmán, rector de la Universidad Autónoma de Nuevo León, enfatizó la necesidad de mejores políticas públicas y una “mejor entrega de los recursos comprometidos” para elevar el nivel educativo. Denunció la retención de recursos por parte de algunos gobiernos estatales, poniendo en peligro la calidad de la educación.
Los rectores solicitaron a la Cámara de Diputados vigilar y gestionar para garantizar que los recursos lleguen directamente a las universidades, evitando retenciones por parte de los gobiernos estatales.
En entrevista, Luis Armando González diferenció la postura de los rectores de la del presidente López Obrador, subrayando su preocupación por la situación educativa y la importancia de considerar la evaluación de la prueba PISA. Los rectores instaron a corregir desequilibrios y construir un país con menos disparidades a través de asignaciones financieras adecuadas para la educación.
