El miércoles pasado, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció la firma de un decreto que oficializa la expropiación de extensas áreas de ejidos y terrenos en el sureste de México. La medida tiene como objetivo avanzar en la implementación del ambicioso proyecto Ferroviario Tren Maya, encomendado a Fonatur.
Según lo detallado en el Diario Oficial de la Federación (DOF), se expropiarán 57-17-70 hectáreas en el ejido Tenabo, Campeche, y 19-47-41 hectáreas en el ejido Tixkokob, Yucatán. Además, se incluyen áreas en los ejidos El Cañaveral y Villa de Guadalupe en Champotón, Campeche; Sisbicchén, Chemax; Tesoco, Valladolid; y San Francisco, Tinum, todos en Yucatán.
El decreto también abarca la expropiación de 96-31-24 hectáreas en el ejido Conhuas, Calakmul, Campeche, y una superficie de 215,171.16 m2 distribuida en 75 propiedades privadas en los municipios de Escárcega, Champotón y Campeche, destinadas a la construcción del Tramo 2 del Proyecto Tren Maya.