La aerolínea Mexicana de Aviación, bajo el control militar y que resurgió tras la quiebra de la empresa original en 2010, ha anunciado la cancelación de ocho destinos sin aviso previo. Estos vuelos, que eran operados en colaboración con la empresa privada TAR, representan aproximadamente el 50% de la cobertura nacional de la aerolínea.
A través de su página de internet, Mexicana notificó a los pasajeros que dejará de operar las rutas a Acapulco, Campeche, Guadalajara, Nuevo Laredo, Puerto Vallarta, Uruapan y Villahermosa. Sin embargo, la aerolínea no ha proporcionado explicaciones sobre las razones detrás de esta decisión y ha instado a los pasajeros a consultar las bases de cancelación.
Un operador telefónico de la aerolínea confirmó que las rutas estarán suspendidas hasta nuevo aviso, indicando que la notificación de la cancelación se recibió la semana pasada. Esto deja a muchos pasajeros en la incertidumbre, ya que deberán esperar nuevas instrucciones de la línea aérea.
Desde su reactivación, Mexicana ha enfrentado desafíos significativos. La aerolínea ha perdido más de 900 millones de pesos y ha transportado un promedio de solo 53 pasajeros por vuelo en su primer año de operaciones. Para operar, ha tenido que alquilar aeronaves debido a la falta de opciones viables en el mercado, y recientemente realizó un pedido de 20 aviones a la fabricante brasileña Embraer.
Mexicana de Aviación, que opera con recursos del erario y depende del ejército, cumple un año desde el inicio de sus operaciones el pasado 26 de diciembre, con el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles como uno de sus principales puntos de operación. La falta de claridad sobre la cancelación de rutas podría agravar aún más la situación de la aerolínea en un mercado aéreo ya complicado.
