La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha solicitado una investigación sobre posibles vínculos del expresidente Ernesto Zedillo y su familia con el crimen organizado. Esta petición surge tras las críticas de Zedillo hacia las políticas de la Cuarta Transformación, particularmente en relación con la reforma judicial y la gestión de obras públicas.
En respuesta a las acusaciones de Zedillo sobre dispendio y falta de transparencia en proyectos emblemáticos del actual gobierno, Sheinbaum ha señalado la necesidad de indagar los supuestos nexos del exmandatario y su esposa con grupos criminales. Esta confrontación reaviva debates sobre la legitimidad moral de figuras del pasado y su papel en la política actual.
Sheinbaum ha defendido las reformas impulsadas por su administración, argumentando que buscan fortalecer la democracia y erradicar la corrupción en el Poder Judicial. Asimismo, ha cuestionado la autoridad moral de Zedillo para criticar las políticas actuales, recordando eventos controvertidos durante su mandato, como el manejo del Fobaproa y las privatizaciones en sectores estratégicos.
La presidenta también ha expresado sorpresa por la elección de Zedillo de publicar sus críticas en medios internacionales, como The Washington Post, en lugar de dirigirse al público mexicano a través de medios nacionales. Esto, según Sheinbaum, refleja una desconexión con la realidad del país y una falta de compromiso con el debate democrático interno.
La solicitud de investigación marca un nuevo episodio en la creciente tensión entre el gobierno actual y figuras del pasado, evidenciando la polarización en el panorama político mexicano. Mientras tanto, la reforma judicial y otras políticas de la Cuarta Transformación continúan generando debate y controversia en diversos sectores de la sociedad.
