En su primer año completo de operación (2024), el emblemático Tren Maya requirió un subsidio de 108 pesos del erario por cada peso recaudado por ingresos propios. Esto representa un costo financiero equivalente al 10 700 % del ingreso generado por el proyecto ferroviario, según datos oficiales.
El informe de la Cuenta Pública 2024 revela que los ingresos propios del Tren Maya fueron de solo 276 millones de pesos, mientras que los recursos aportados desde el presupuesto federal ascendieron a 29 912 millones de pesos, generando una pérdida neta de 29 612 millones.
Para ponerlo en perspectiva, el Metro de la Ciudad de México opera con un subsidio de aproximadamente 3.4 pesos por cada peso ingresado, lo que contrasta fuertemente con el apoyo financiero otorgado al Tren Maya.
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El Tren Maya es una de las obras más importantes del gobierno de la Cuarta Transformación, diseñada para impulsar el turismo y el desarrollo económico en la Península de Yucatán.
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Sin embargo, los elevados niveles de subsidio durante su primer año han encendido el debate sobre su sustentabilidad financiera y el uso eficiente de los recursos públicos.
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Las autoridades buscan compensar estas pérdidas mediante la integración del transporte de carga y el incremento gradual de usuarios y tarifas.
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Subsidio por peso recaudado: 108 pesos.
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Ingresos propios 2024: 276 millones de pesos.
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Subsidio total 2024: 29 912 millones de pesos.
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Pérdida neta: 29 612 millones de pesos.
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Comparativo Metro CDMX: subsidio de 3.4 pesos por peso.
Aunque el Tren Maya avanza con la expectativa de favorecer la región sureste —con 42 trenes, servicios de El reto será aumentar la autofinanciación mediante carga, turismo aliado y ocupación para reducir drásticamente el subsidio estatal.
