
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, declaró que hasta el momento el gobierno de Estados Unidos no ha notificado formalmente ninguna sanción ni restricciones oficiales sobre los vuelos mexicanos, pese a anuncios recientes por parte de autoridades estadounidenses. Sheinbaum explicó que la posible limitación de vuelos se relaciona con la saturación en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y que la decisión del gobierno mexicano de 2023 de reubicar las operaciones de aerolíneas de carga estadounidenses a un aeropuerto más lejano fue tomada con base en estudios técnicos y pensando en mejorar la seguridad y la eficiencia.
La mandataria reiteró que no hay razón para que México reciba una sanción por esta medida, y subrayó que ya se llevan a cabo mesas de trabajo con la Secretaría de Infraestructura y Transporte para aclarar cualquier duda con las empresas aerocomerciales. Según Sheinbaum, aunque algunas aerolíneas estadounidenses mostraron su molestia por el aviso breve para el traslado, la mayoría considera que la decisión ha beneficiado al reducir el congestionamiento en el principal aeropuerto mexicano.
Por su parte, el secretario de Transporte de Estados Unidos, Sean Duffy, ha amenazado con rechazar solicitudes de vuelos de aerolíneas mexicanas si México no modifica las decisiones tomadas en 2022 y 2023 que afectaron a las aerolíneas estadounidenses, argumentando violaciones a acuerdos bilaterales y prácticas anticompetitivas. Sin embargo, la presidenta Sheinbaum afirmó que estas medidas en México son decisiones soberanas que privilegian la seguridad y que las empresas ya se han ido ajustando a ellas durante el último año y medio.
Esta situación se suma a una creciente tensión en materia de aviación entre ambos países, donde Estados Unidos considera que las restricciones mexicanas otorgan una ventaja injusta a las aerolíneas nacionales, mientras México defiende su derecho a reorganizar sus operaciones aeroportuarias para mejorar la seguridad y descongestionar el tráfico aéreo. Por ahora, la administración mexicana se mantiene a la espera de una notificación formal y mantiene abierto el diálogo para resolver posibles diferencias y evitar medidas punitivas que perjudiquen la conectividad internacional.










