El gobierno federal ha anunciado que realizará modificaciones al decreto que regula la importación de automóviles usados, conocidos popularmente como “autos chocolate”. Esta decisión surge luego de detectarse diversos vacíos legales y abusos en el proceso de regularización de estos vehículos, que han generado irregularidades en el mercado automotriz.
Las autoridades reconocen que el marco actual ha permitido prácticas que distorsionan el espíritu original de la normativa, creada para facilitar el acceso a vehículos a precios accesibles. Se han identificado casos de importación fraudulenta, evasión fiscal y el ingreso de unidades que no cumplen con los estándares de seguridad y ambientales requeridos en el país.
Los ajustes al decreto buscarán establecer controles más estrictos en el proceso de importación y regularización, con el objetivo de garantizar que solo los vehículos que cumplan con todas las especificaciones técnicas y legales puedan circular en territorio nacional. Las nuevas medidas pretenden proteger a los consumidores de posibles engaños y garantizar la competencia leal en el sector automotriz.
El anuncio ha sido bien recibido por asociaciones de automovilistas y comerciantes formales, quienes esperan que estas modificaciones contribuyan a ordenar el mercado y mejorar la seguridad vial. El gobierno enfatizó que el objetivo no es prohibir estos vehículos, sino regularizarlos de manera correcta y transparente para beneficio de los consumores y del sector formal.
