Ciudad de México, México.– En una sesión marcada por el debate, las acusaciones y la tensión política, la mayoría de Morena y sus aliados aprobaron en lo general el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2026, que contempla un gasto histórico de 10 billones 193 mil millones de pesos, mientras la Oposición protestó con sombreros “ensangrentados” y consignas por los recortes en materia de seguridad pública y a los estados y municipios.
Con 358 votos a favor y 133 en contra, el pleno de la Cámara de Diputados avaló el proyecto que, según los legisladores opositores, centraliza el gasto en Palacio Nacional y mantiene privilegios para las obras emblemáticas del Gobierno federal, como el Tren Maya y el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA).
El presupuesto representa un incremento de 5.9 por ciento respecto a 2025. De acuerdo con el dictamen, los programas prioritarios recibirán 987 mil 160 millones de pesos, mientras que los proyectos de inversión, entre ellos la construcción de siete nuevos trenes, contarán con una bolsa de 536 mil 806 millones de pesos.
El Gasto Federalizado se estimó en 2.8 billones de pesos, los ramos administrativos en 2.4 billones, y los órganos autónomos en más de 149 mil millones, en tanto que Pemex obtendrá 263.5 millones para amortización de deuda.
Debate marcado por el asesinato de Carlos Manzo
El asesinato del alcalde de Uruapan, Michoacán, Carlos Manzo, permeó el debate legislativo. Diputados de oposición acusaron recortes a la seguridad como causa de la vulnerabilidad de los municipios, mientras que los morenistas respondieron con carteles que decían “carroñeros”, calificando de oportunismo político el uso del caso.
El priista Carlos Eduardo Gutiérrez Mancilla subió a tribuna con una bandera de la Generación Z y un cartel con la hora del homicidio de Manzo (“20:10”), acusando al Gobierno de Morena de “narcogobierno”. En respuesta, Arturo Ávila y otros legisladores oficialistas replicaron con gritos y pancartas, lo que obligó al coordinador de Morena, Ricardo Monreal, a intervenir para calmar los ánimos.
El panista Germán Martínez acusó al oficialismo de “militarizar el país” y reducir fondos clave de seguridad, como el FASP y el Fortaseg, al señalar que el Plan Michoacán anunciado por la presidenta Claudia Sheinbaum no tendrá resultados sin presupuesto suficiente.
“No se pacifica con cuentos bribones. Este no es un asunto de Batman y Robin, es un asunto de coordinar a las instituciones”, advirtió Martínez, al comparar el plan con un “segundo piso del virreinato de Peña Nieto”.
Por su parte, el coordinador del PRI, Rubén Moreira, denunció que el presupuesto recorta 21 mil millones de pesos a la seguridad pública, reduce 29 por ciento el apoyo al campo y disminuye a la mitad los recursos para salud materna y reproductiva. “El dictamen se hizo en Hacienda, no en la Cámara”, acusó.
La diputada de Movimiento Ciudadano, Gloria Núñez, advirtió que el PEF “asfixia al federalismo”, con aumentos mínimos para los municipios.
“Cada peso que se recorta a los municipios es una lámpara que no se enciende, una calle que no se pavimenta, una patrulla que no circula”, lamentó.
Defensa de Morena
Desde la bancada mayoritaria, la diputada Flor de María Esponda defendió el proyecto, asegurando que la reducción a seguridad responde a la transferencia de la Guardia Nacional a la Sedena, y calificó de “ruin” el uso político del homicidio del alcalde michoacano.
“Hay que ser muy ruines para utilizar el asesinato del presidente municipal de Uruapan para el golpeteo político. Son carroñeros”, sostuvo.
Morena argumentó que el PEF 2026 prioriza el bienestar social y mantiene la política de austeridad republicana, destinando la mayor parte de los recursos a programas sociales, infraestructura ferroviaria y deuda pública controlada.
