San Luis Potosí, México.– El Ayuntamiento de la capital potosina, encabezado por Enrique Galindo Ceballos, aplicará para 2026 un incremento progresivo del impuesto predial que impactará a predios habitacionales, comerciales, industriales y rústicos. La medida ha generado críticas entre ciudadanos y empresarios, quienes la consideran una carga fiscal excesiva en un contexto económico complicado.
El esquema aprobado establece que el pago se calculará con base en el valor catastral del inmueble, integrando una cuota fija por rango y una cuota progresiva sobre el excedente. En la práctica, mientras mayor sea el valor de la propiedad, mayor será la alza en el predial.
Impacto en vivienda, comercios e industria
Para predios habitacionales urbanos y suburbanos, las tasas van del 0.1513% al 2.476%, dependiendo del rango. Esto se traduce en aumentos directos en el pago anual:
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Un predio con valor de 1,500,073 pesos pasará de pagar 2,302 pesos en 2025 a 2,415 pesos en 2026, un incremento de 113 pesos.
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En comercios e industrias, el aumento es mayor: un inmueble valuado en 7 millones de pesos pagará 12,112 pesos en 2026, frente a los 10,668 pesos de 2025, es decir, 1,444 pesos adicionales.
El sector empresarial ha manifestado su preocupación por el impacto en la competitividad y en los costos fijos de operación.
Predios rústicos y baldíos también suben
Los predios rústicos tendrán tarifas distintas según su uso —ganadero, agrícola, industrial o turístico— con tasas de 1.03 a 1.545 al millar.
Incluso los predios ejidales y las instituciones religiosas verán ajustes en sus pagos cuando se modifique la base gravable.
A esto se suma que los predios baldíos con delimitación (barda, cerca o malla) serán gravados dependiendo de su zona (habitacional, comercial o industrial), lo que impacta a propietarios de terrenos sin edificar y a pequeños desarrolladores.
Pago mínimo y sanciones
El pago mínimo permanecerá en 4 UMA, que deberá cubrirse en una sola exhibición, sin posibilidad de parcialidades, lo que limita la flexibilidad de los contribuyentes.
Además, el Ayuntamiento advierte que quienes no tengan su propiedad empadronada podrían enfrentar recargos y sanciones, pese a que ciudadanos denuncian falta de información y difusión sobre el sistema de empadronamiento.
Críticas por falta de beneficios visibles
Para sectores de la población, este incremento representa un ajuste desproporcionado, especialmente para la clase media y pequeños negocios, que no han visto mejoras significativas en los servicios públicos ni en la infraestructura municipal.
La política fiscal del Ayuntamiento, señalan, contradice el discurso de “San Luis Amable”, pues consideran que los nuevos cobros afectan directamente la economía familiar y local más que promover bienestar.
