El Director de Servicios Municipales, Adrián Tercero Nava, precisó que en la temporada las actividades en el Rastro disminuyen y en la denominada Semana Mayor, no hay actividades en el centro de matanza.
Precisó que ante esta situación, los vendedores de este producto se previenen con un stock de carne para no laborar esos días, ya que en la entidad prevalecen las costumbres que se desprenden de esta celebración religiosa.
En tanto, el resto del año, mensualmente el Rastro registra un sacrificio de 2 mil cabezas de ganado y prevén una ligera baja en el sacrificio en las siguientes semanas, a causa de esta celebración litúrgica.
En cuanto al funcionamiento de este centro de matanza, Tercero Nava destacó que ha mejorado la operatividad del Rastro, los procesos se realizan apegados a las normas de sanidad y hay una mayor garantía para la población en el consumo de carne cien por ciento libre de agentes contaminantes.
Añadió que hay constante coordinación con la Comisión Estatal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios en la revisión a los introductores y se fortalecieron las medidas y requisitos para el sacrificio de los animales.
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