San Luis Potosí SLP.- Faltando a la civilidad política y al respeto, el alcalde Xavier Nava Palacios no invitó a los regidores del PRD Ana Pineda Guel y Eloy Franklin a su primer informe de gobierno, demostrando así a su intolerancia a la diversidad de ideas y a la crítica.
“Somos representantes populares electos por la voluntad popular, representamos a amplios sectores de la población en el Cabildo, que es el máximo órgano del Ayuntamiento de San Luis Potosí, y ni así el alcalde Nava es capaz de abrir los ojos para darse cuenta que la sociedad potosina es plural”, manifestó la regidora Pineda Guel.
Explicó que “con represalias de este tipo, no es como se debe conducir quien gobierna la ciudad, con este proceder obtuso Nava se revela como una persona intolerante, censora y vengativa, quiere un Cabildo sometido, sobajado, silente, que le aplaude y le vote todas sus propuestas sin chistar, tal parece que no se ha dado cuenta que ya estamos en el siglo XXI”.
Pineda Guel aseguró que “Nava no nos invitó a su primer informe porque hemos alzado la voz, lo hemos puesto en evidencia, a sus mentiras, sus actos de corrupción, el nepotismo de los primos Portilla, las adjudicaciones de obras, compras y servicios sin licitación; la violación de derechos humanos de mujeres e indígenas; como no somos comparsas de su mal gobierno, hasta se le olvidó que la cortesía es importante, ya no digamos la civilidad política”.
También comentó que “esta situación es preocupante, quizá Nava desconoce o finge no saber, que el evento del informe es una sesión solemne del Cabildo y nosotros somos parte de este máximo órgano de gobierno municipal, y al no invitarnos a quien agravia es a la ciudadanía, no a nosotros, lo que confirma que es un político censor y represivo, esas prácticas del pasado las sufrió el doctor Salvador Nava, del que se dice heredero y seguidor”.
Informó que “este viernes enviamos un oficio dirigido al secretario general del Ayuntamiento, Sebastián Pérez, para manifestarle que no se nos hizo llegar por ningún medio la invitación”.
La regidora Pineda concluyó: “Somos una oposición constructiva, cobramos un sueldo no para calentar la silla en el Cabildo sino para defender los intereses y derechos de la ciudad y la población, por lo que ya volvimos a comprobar que Nava quiere un Cabildo a modo, en el que no haya debate ni discrepancias, así difícilmente se pueden presumir resultados y avances democráticos”.