Señaló la importancia de proteger la vida e integridad de las mujeres, niñas y niños, por lo que la propuesta propone que a quien cometa el delito de abuso sexual en contra de una persona menor de dieciocho años de edad o de una persona que por su condición no tenga la capacidad de comprender el significado del hecho, aun con su consentimiento, o que por cualquier causa no pueda resistirlo o la obligue a ejecutarlo en sí o en otra persona, se le impondrá una pena de diez a dieciocho años de prisión y sanción pecuniaria de doscientos a quinientos días del valor de la unidad de medida y actualización.
De igual manera, la reforma explica que se entiende por actos eróticos sexuales los tocamientos o manoseos corporales obscenos, o los que representen actos explícitamente sexuales u obliguen a la víctima a representarlos. Así como que se considera abuso sexual cuando se obligue a la víctima a observar un acto sexual, o a exhibir su cuerpo sin su consentimiento.
Govea Arcos consideró alarmante los casos de abuso infantil que se han registrado en el estado, como el caso suscitado en la huasteca potosina donde un profesor de un jardín de niños, abusaba de los menores, no existiendo penas contundentes que castiguen actos tan perversos.
El legislador enfatizó en que el Poder Legislativo debe apropiarse de las medidas pertinentes para que quienes realicen este tipo de delitos reciban una pena proporcional.
Explicó que hay estudios que sostienen que las y los infantes víctimas de abuso sexual, llevan en promedio 20 años para hablar y superar de tal situación.”
Finalmente, la iniciativa se turnó a comisiones para su análisis y posteriormente ser discutida y votada en el pleno del Poder Legislativo.