De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), la lactancia materna es una de las formas más eficaces de asegurar la salud y la supervivencia de los niños; recomienda que las madres inicien la lactancia materna en la hora siguiente al parto.
Además, que la lactancia sea exclusivamente materna en los primeros 6 meses de vida para lograr un crecimiento, desarrollo y salud óptimos. Posteriormente, los lactantes deben seguir siendo amamantados y recibir alimentos complementarios seguros y nutricionalmente adecuados para atender sus crecientes requisitos nutricionales.
La diputada Paola Arreola expuso que aunque se trata de una práctica y decisión que compete a cada una de las mujeres al convertirse en madre, las instituciones deben de brindar las herramientas para apoyar esta determinación de alimentar al bebé del seno materno para dotar a través de este, de todos los beneficios para la salud y desarrollo del infante.
Enfatizó que es de suma relevancia que en los centros de trabajo se cuente con espacios dignos y adecuados, para que las madres lactantes puedan realizar las extracciones de leche y proveer de alimento a sus hijos.
Asimismo, Paola Arreola reconoció que hoy en día, existen espacios públicos en los que se apoya a la lactancia materna, brindando un espacio cómodo para que las madres puedan alimentar libremente a sus hijos, coadyuvando así, a la normalización de amamantar.
“Es algo tan natural y con grandes beneficios para la salud y desarrollo de los niños, pero hoy, por la falta de información, de apoyo y de propias políticas públicas, sabemos que según la OMS, a nivel mundial, solo un 40% de los lactantes menores de seis meses reciben leche materna como alimentación exclusiva”, puntualizó Arreola Nieto.