Uno de los aspirantes al cargo de Contralor de la ASE, Carlos A. Castillo Rodríguez, denunció hace poco que se registraron varias irregularidades desde la Comisión de Vigilancia que preside José Antonio Zapata Meraz, al elegir a Rosalba Salazar Miranda quien tiene afiliación político partidista con Morena, fue impuesta por Gabino Morales Mendoza y además trabajó en la Secretaria del Bienestar del gobierno federal, tres aspectos que son fueron ilegales dentro de su proceso y que lo llevaron a interponer un juicio de amparo ante la justicia federal para la reposición del proceso y convocatoria del titular del órgano interno de control de la ASE.
El legislador del Partido Verde Ecologista de México, reconoció que este asunto hubo mano negra que salió no sólo desde el cobijo del súper delegado Gabino Morales sino desde la Secretaria General de Gobierno y en específico refirió el nombre del titular de la dependencia, Alejandro Leal Tovías.
“Si creo que en el tema de la elección de la Contraloría General es cierto que se siguen dando acuerdos en lo oscurito bajo la mesa. Lo digo es cierto, prevalecen los acuerdos de voluntad del ejecutivo, pero está también en los legisladores romper con esos paradigmas que se vienen haciendo con esta y otras legislaturas por lo que hago un llamado para que se voten de acuerdo a los perfiles y a la democracia que el cargo implica”.
Al ser parte de la Comisión de Vigilancia del Congreso del Estado está consciente de que se dieron ciertas trampas en la elección del Contralor interno de la ASE, pero fueron en el pleno y estás fueron “cambios de moneda política, en el caso de la contralora para mí ella no era la mejor persona calificada, porque el cargo es muy importante, es una persona a modo, y ese día de la elección anduvieron cabildeando los de Morena a través de prebendas con el gobierno del Estado”.
Consideró que José Antonio Zapata, no evalúo correctamente el desempeño de cada uno de los participantes al cargo y por ello se está dando esta situación legal en estos momentos “nosotros no debemos ser una ventanilla más del ejecutivo del Estado”.