En su exposición de motivos, se establece que “la violencia al interior de los centros educativos es un aspecto que a todas luces vulnera el desarrollo sano y en condiciones óptimas de los menores, sin embargo actualmente no obstante los esfuerzos para abatir esta problemática es preciso establecer precisiones que brinden certeza tanto a los menores pero además al personal que labora en ellos, básicamente privilegiando la concordia y tranquilidad al interior de las instancias educativas”.
“Hay casos puntuales en los que menores han sido víctimas de violencia de diferentes tipos, ello debido a la falta de políticas y estrategias que garanticen la estabilidad y el ambiente óptimo para el desarrollo de los menores en los centros escolares”.
“En este sentido es necesario, que para que se obtengan resultados se establezcan canales de colaboración entre las autoridades educativas, padres de familia e instancias que coadyuven a la adecuada consecución del objetivo primordial que es el garantizar la tranquilidad en los centros escolares erradicando prácticas que caigan en violencia de cualquier tipo”.
Por ello, “en el marco de atención a los objetivos planteados por la UNESCO en este tenor es preciso establecer prescripciones normativas en este sentido: Eliminar la violencia y el acoso escolar, incluida la violencia escolar por motivo de orientación sexual, y Prevenir la discriminación de alumnos y docentes por razones de salud o de género”.
Con las propuestas de reforma a la Ley de Prevención y Seguridad Escolar del Estado y Municipios de San Luis Potosí, se plantean diversas modificaciones para contribuir a mejorar los espacios educativos, sobre todo, que se encuentre en el marco de cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible y las metas que tienen por objeto garantizar que niños y adolescentes conviertan en realidad su derecho a una educación inclusiva de calidad en un entorno de aprendizaje seguro.
La iniciativa de reforma se analiza en las comisiones respectivas del Congreso del Estado.