Además, con el fin de establecer un control sobre el uso de esos fondos para los animales, se propone adicionar una nueva atribución a los ayuntamientos que les permita vigilar que los albergues para refugio y adopción efectivamente cumplan con los preceptos de la ley, especialmente en contar con licencia vigente y en cumplir con esta ley en materia de bienestar animal.
De esta forma, los centros de refugio y adopción contarían con una fuente de ingresos constante y con vigilancia concreta de parte del ayuntamiento, disposiciones que serían vital para la satisfacción de sus necesidades e incluso, la medida podría causar que las asociaciones y rescatistas independientes tomen un papel aún más activo en la denuncia de casos de incumplimiento de la ley al contar con un estímulo, significando mayores ingresos por conceptos de multas tanto para los ayuntamientos como para los albergues.
Además, lo recabado por las multas, colaboraría directamente al cumplimiento del objeto de la ley, en lo referente a proteger la vida y favorecer el respeto y el buen trato a los animales; señala el legislador en su iniciativa.
Para lograr lo anterior, Villarreal Loo propuso reformar la Ley Estatal de Protección a los Animales con el objetivo de ampliar las fuentes de respaldo a los albergues de refugio y adopción de animales para que puedan seguir desarrollando sus funciones.
Es necesario buscar maneras de garantizar sus buenas condiciones para cumplir con las requerimientos de estancia de los animales que la Ley actual demanda en materia de trato digno a las mascotas.
No basta con que existan espacios para los animales rescatados del abandono y maltrato, es absolutamente necesario que los albergues tengan los recursos para ofrecer condiciones que cumplan plenamente con la ley; además se necesita también que los centros de refugio puedan responder adecuadamente en el caso de enfermedades de los animales, para evitar contagios que los pongan en peligro, y que incluso pudieran suponer riesgos para la salud pública, expuso el legislador.
La iniciativa de Villarreal Loo se turnó a las comisiones de Ecología y Medio Ambiente; Primera; y Segunda de Hacienda y Desarrollo Municipal para su análisis correspondiente.