Dijeron que por medio de la firma de un acta de asamblea acordaron donar dicho terreno a cambio de varias obras que solicitaron y que nunca se cumplieron.
Aseguraron que el acuerdo se firmó con el personal de la Promotora del Estado, y que el anterior gobernador, Juan Manuel Carreras López solo se presentó a dar el banderazo de inicio, reconociendo que, “daba indicaciones a la gente de la promotora, pero nunca le hicieron caso sus subordinados”.
Rogelio Cerda Jiménez, secretario del ejido explicó que el acuerdo de donación del terreno quedó asentado en un acta de asamblea, en donde se establece de forma clara y precisa, “que de no llevarse a cabo el proyecto parque tipo Tangamanga en un plazo de cuatro años estas tierras se regresarán automáticamente al ejido de Santa Ana”.
Agregó que fue en el año 2018 cuando se creó el acuerdo con la Promotora del Estado, a la que solicitaron habilitar un pozo en la congregación; regularizar la reserva de crecimiento de San Isidro a nombre del ejido de Santa Ana y asignación de área para comercio individual en el proyecto del parque.
Además, que el trámite de escritura de cada ejidatario fuera sin costo; paquete de material de construcción para cada ejidatario para formar un pie de casa; block, arena, cemento y otros insumos.
También, el otorgamiento de animales vacuno y caprino; dos tractores para el ejido; que los lotes que se encuentren colindando con el parque proyecto presentado por la promotora contaran con los servicios básicos de agua y drenaje.
Cerda Jiménez lamentó el poco compromiso que existió durante la anterior administración, en donde los defraudaron, ya que ellos cumplieron con la donación del terreno y sin embargo el gobernador no hizo lo que le correspondía