Familias sin seguridad social, prioridad del DIF Estatal

• En los primeros 100 días de labores la loable institución benefició a más de 5 mil 500 personas con Ferias de la Salud, entre adultos mayores, jóvenes, niñas y niños.

San Luis Potosí SLP.-  En los primeros 100 días del nuevo Gobierno en San Luis Potosí, el Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) emprendió el fortalecimiento y promoción de la atención médica y preventiva para las familias potosinas de las cuatro regiones del Estado, acciones que seguirán ofreciéndose para garantizar el bienestar social de toda la ciudadanía.

Ruth González Silva, presidenta de la institución de ayuda social, mencionó el impulso que se dio en los primeros tres meses de trabajo a las Ferias de Salud y bienestar social, en lo que significó una nueva manera de atender a los grupos más necesitados alentada por el Gobernador Ricardo Gallardo Cardona.

Este programa de salud otorgó servicios médicos de primer nivel, consultas generales y de especialidad; promoción de hábitos de cuidado de la salud y prevención de enfermedades, privilegiando a aquellas comunidades de alta y muy alta marginación, así como a los pueblos indígenas, que en su mayoría no cuentan con ningún tipo de seguridad social, y que lamentablemente fueron excluidas por anteriores gobiernos, dijo la presidenta del DIF Estatal.

Durante los primeros 100 días, las Ferias de la Salud llegaron por primera vez a los municipios de Ébano, Ciudad Valles, Xilitla, Cerritos, Moctezuma, Charcas y Soledad de Graciano Sánchez. Este tipo de programas de atención a la salud seguirán promoviéndose con el objetivo de garantizar el sano desarrollo de las familias potosinas durante el año 2022 para llegar, sin distinción alguna, hasta las zonas más alejadas que por omisión de la herencia maldita estuvieron en el olvido y total desinterés de los gobiernos, aseguró.

En total, más de 5 mil 500 potosinas y potosinos fueron beneficiados con atención de servicios integrales de salud y bienestar, de las cuales el 40 por ciento correspondió a personas adultas mayores; 15 por ciento a jóvenes y el 25 por ciento a niñas y niños; población que no cuenta con seguridad médica, pero que recibieron consultas médicas, terapias de rehabilitación, medicamentos gratuitos, charlas sobre cuidados dentales y de educación sexual; además de apoyos de bienestar comunitario como reparación de aparatos eléctricos y cortes de cabello, entre otros.

 

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