Este 23 de marzo, en el Hospital Central se llevó a cabo el Código Verde, donde personal del nosocomio formó una valla humana y despidió al joven César con aplausos, respeto y agradecimiento a su familia por este acto de generosidad.
Las córneas permanecerán en el Hospital Central “Dr. Ignacio Morones Prieto”, donde serán utilizadas para restaurar la visión del paciente que lo necesite, mientras que el hígado y los riñones fueron trasladados al Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán” en Ciudad de México, donde serán implantados en pacientes que esperan con ansias una segunda oportunidad.
El traslado de los órganos a la Ciudad de México se llevó a cabo de manera expedita y eficiente, utilizando un helicóptero especialmente designado para este propósito lo que garantiza que los órganos lleguen a su destino de manera oportuna, maximizando así las posibilidades de éxito en los procedimientos quirúrgicos y brindando una nueva oportunidad de vida a quienes esperan con esperanza y expectación.
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