De trabajo no se les recuerda nada. Del 1 de octubre de 2018 al 30 de septiembre del 2021 las panistas Nayeli Vazquez y Nadia Viera no hicieron nada, excepto avalar y ser cómplices de los robos, desfalcos, desviación de recursos, malversación de fondos y saqueo que hicieron Xavier Nava, Sebastián Pérez, Rodrigo Portilla y Oscar Valle, de las finanzas del ayuntamiento de la capital potosina.
Alicia Nayeli Vazquez y Nadia Viera cerraron los ojos a los escándalos cometidos por el alcalde Nava y su equipo de fifis. Votaron a favor de desviar millones de pesos en proyectos fallidos como la ciclovía, el bacheo, el programa “de piso a techo”, la renta de vehículos, bonos millonarios que se otorgaron entre los mismos funcionarios, los aviadores en el ayuntamiento y en el colmo de la desvergüenza, el hotel que construyen en la Sierra de Álvarez con dinero de los capitalinos.
Pero haber sido las sirvientas y tapetes de Nava tiene su recompensa. Además de tener un salario de 98 mil pesos mensuales, Alicia Nayeli Vazquez y Nadia Viera brincaron el charco y se fueron a dar la gran vida a Europa.
Las dos panistas no saben siquiera formular una oración coherente o exponer una idea en castellano, pero decidieron que ellas nacieron para el primer mundo, así, con el dinero que saquearon al pueblo potosino, tomaron un avión y aterrizaron en París, la ciudad Luz, catalogada como una de las más caras del mundo.
Por supuesto que las dos mujeres si de algo carecen, además de decencia, es de clase. La naca de Nadia decidió que para visitar la ciudad de la moda lo haría en unos pantalones desgarrados y descoloridos de viejos, que le robó a su hermana, porque le quedan de brincacharcos, con una playera extra grande que la hace lucir más obesa que de costumbre, no la salvó ni el negro del outfit, además unos tenis Panam que Dios guarde.
En cuanto a moda, de Nayeli, mejor ni comentar nada, la navista no tiene gracia ni para ser tapete.
Las dos panistas-navistas fueron al Museo de Louvre, pero al ver que el costo de entrada era de 59 euros prefirieron la selfie en la explanada con la pirámide de cristal, igual de arte no saben nada, por lo que descartaron el resto de los 159 museos que hay en la ciudad.
También hicieron parada en la Torre Eiffel, pero como también cobran, se dijeron una a otra que tienen miedo a las alturas y no subieron. Les hablaron de los castillos y palacios del Rey Sol, de los Luises y de María Antonieta, pero como nunca habían escuchado de ellos les hicieron el fuchi, como también descartaron conocer el Palacio de Versalles, igual de política, arte, cultura y glamour no entienden.
Las sirvientas de Nava optaron por lo que los gringos definen como “window shopper”.
Pero lo importante es que andan en París, que se fueron de vacaciones y que no les costó un centavo, todo es con cargo al dinero que le robaron a los potosinos.