Lo anterior lo expuso el director general de la Comisión Estatal del Agua (CEA), Benjamín Pérez Álvarez, quien señaló que el municipio capitalino no debe evadir sus responsabilidades, pues el alcalde Enrique Galindo debe reconocer la crisis social que ha generado la falta de resultados del Interapas, ya que actualmente carecen de agua potable colonias de San Luis, Soledad y Cerro de San Pedro, no solo las que son abastecidas por las presas El Realito y San José.
Detalló que, por su posición geográfica, San Luis Potosí históricamente ha tenido problemas de acceso al agua; sin embargo, se ha agravado por la falta de lluvias, “pero sobre todo por las deficiencias del Interapas”, expresó Pérez Álvarez, quien puntualizó que, con El Realito, que presentó innumerables fallas a causa de la pésima calidad de materiales con que fue construido por la herencia maldita, el organismo operador detuvo todo mantenimiento a pozos.
Reafirmó que, el Estado mantiene el apoyo a las y los potosinos y durante 2023 repartió más de 67 millones de litros de agua gratuita, entregó 30 mil cisternas a las viviendas, puso a disposición del Interapas infraestructura hídrica como el Pozo Salk III, cuyos gastos corren a cargo de la CEA, los tanques de recepción y almacenamiento para hacer más ágil la distribución.
Además del rescate de El Peaje, olvidada por la herencia maldita, con capacidad de almacenamiento de 10 millones de metros cúbicos; también se gestionó la sustitución de mil 800 metros de tubo del acueducto de El Realito en los puntos de mayor incidencia de fallas y ante la federación la reparación de las fisuras en la cortina de esta presa.