Recordó que con anterioridad, la autoridad capitalina identificó y colocó mantas de alerta en casonas que representaban un riesgo debido a sus condiciones estructurales, por lo que se detectaron a 120 con estas características.
“Si bien hasta el momento no hemos tenido reportes ni tampoco en los recorridos realizados por personal de Protección Civil, de situaciones de desprendimientos, derrumbes o algún otro problema ante las lluvias que se han registrado en la ciudad, nuestra vigilancia es permanente”.
Asimismo, destacó la coordinación que se mantiene con la representación local del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), para la atención de las casonas antiguas ya que varias de ellas tienen protección por parte de esa dependencia federal.
De la misma manera, se unen esfuerzos para localizar a sus propietarios a través de la Dirección de Catastro y de Desarrollo Urbano, con lo que se ha logrado el acercamiento con los dueños, quienes se han comprometido a aplicar las acciones pertinentes para evitar algún tipo de peligro para la ciudadanía.
Por otro lado, en cuanto al riesgo que pueden representar los árboles de grandes dimensiones o bien, enfermos o ya secos durante esta temporada, López Olivares añadió que se tienen estrecha comunicación y colaboración el área de Parques y Jardines, y Servicios Generales, para atender los reportes de la misma población.