Funcionarios de primer nivel en el gobierno federal confirmaron a MILENIO que uno de los destinos probables del ex director de Petróleos Mexicanos (Pemex) Emilio Lozoya Austin y su esposa, Marielle Helene Eckes, es Alemania, país con el que México no tiene tratado de extradición y en donde pudieran encontrarse ocultos por ser un destino en el que gozan de amplias ventajas legales, políticas y económicas que dificultarán al extremo cualquier intento por repatriarlos.
Aunque los funcionarios detallaron que no se descarta que el matrimonio Lozoya-Eckes siga escondido en México, una de las líneas de investigación que persigue el gobierno federal apunta a que el ex funcionario ya abandonó territorio nacional y se encuentra en Alemania. No solo es un país que conoce desde la adolescencia y en el que ha tejido una red de amistades de primer orden, sino que desde hace tiempo tramitó su ciudadanía alemana por matrimonio.
El razonamiento seguido por las autoridades mexicanas se basa en la ventaja estratégica que significa para Lozoya refugiarse en Alemania. En particular, dada la nacionalidad y recursos de su esposa, la multimillonaria Marielle Helene Eckes Fassbender, heredera del poderoso consorcio industrial de jugos Eckes Granini Deutschland —el más importante de Europa—, cuya familia posee importantes conexiones políticas al más alto nivel.
Los funcionarios consultados, que pidieron el anonimato por no estar autorizados para dar declaraciones, detallaron que, jurídicamente, Lozoya goza de la protección de la Constitución alemana, que prácticamente prohíbe la extradición de sus ciudadanos a terceros países que no sean miembros de la Unión Europea.
La Ley Básica de la República Federal de Alemania (Constitución) establece en su artículo 16, sección 2: “Ningún alemán puede ser entregado a países extranjeros. Por ley, se puede hacer una excepción para la extradición a un Estado miembro de la Unión Europea o a un tribunal internacional en la medida que se respete el estado de derecho”.
La propia Secretaría de Relaciones Exteriores reconoce la dificultad para obtener la extradición de un ciudadano alemán o, incluso, de cualquier otra nacionalidad. El estudio “Instrumentos Internacionales firmados por México en materia de Extradición” detalla que Alemania es uno de los países que no ha accedido a firmar con México un acuerdo en la materia.
Lo que se tiene, en cambio, es un limitado mecanismo de cooperación en la forma de un Convenio de Reciprocidad en Materia de Asistencia Jurídica que data de 1956. A la fecha no ha sido ratificado por el Senado o el Bundestag, por lo que permanece en nivel de nota verbal entre la embajada mexicana y el Ministerio de Asuntos Extranjeros alemán.
La clave yace en parte del convenio, en el que Alemania explícitamente advirtió: “el gobierno federal garantiza al gobierno de los Estados Unidos Mexicanos su colaboración respecto a la asistencia legal (jurídica) en materia penal (…) en la medida que lo permitan las leyes locales estatales”.
La protección que le brinda la residencia alemana contra la extradición no es el único elemento jurídico que opera en favor de Lozoya en caso de permanecer en Alemania: un ciudadano de ese país tiene derecho a reclamar protección de persecución política en un tercero, proceso que también puede tomar años en resolverse.
PROTECCIÓN A FAMILIARES
Un juez federal otorgó una suspensión provisional que frena por el momento cualquier orden de captura contra Marielle Helene Eckes y Gilda Susana Lozoya Austin, esposa y hermana, respectivamente, de Emilio Lozoya Austin.
El juez decimocuarto de distrito de amparo en materia penal, Erik Zabalgoitia Novales, concedió la medida cautelar y fijó una garantía de 18 mil pesos a cada una.
Ambas reclamaron que la juez de control María Elena Cardo Ramos, adscrita al Centro de Justicia Penal Federal con sede en el Reclusorio Preventivo Sur, libró una orden de aprehensión en su contra.
La medida cautelar otorgada por Zabalgoitia solo evitará la captura de las familiares de Lozoya siempre y cuando no se les haya ordenado detener por delitos graves.
Javier Coello, abogado del ex director de Pemex Emilio Lozoya, aseguró que su cliente no ha salido del país y acusó que el ex funcionario y su familia son víctimas de una persecución por venganza.
En entrevista con Azucena Uresti en MILENIO Televisión, el litigante indicó que Lozoya “dará la cara para aclarar todo siempre y cuando se le respete la presunción de inocencia, sus derechos y que no sigan acusando a su familia.
“Mi cliente tiene un amparo, una suspensión provisional; no puede ser detenido hasta que el juez no resuelva la suspensión definitiva. Lo único que estamos esperando es que nos enteren a través del juez federal de qué delitos se le acusa para hacer una estrategia jurídica y defenderlo.
“Eso de que esté en Alemania o que puede estar en China son cuentos chinos de algunas fuentes de la procuraduría, que yo respeto, pero no comparto”.
Coello informó que se han tramitado amparos para los hermanos y la madre de Lozoya, al reclamar que se metan con la familia de su cliente: “Eso no se vale.
“Me acabo de enterar que la Unidad de Inteligencia Financiera, violando la ley, aseguró la cuenta de la mamá del licenciado Lozoya. Eso quiere decir que hay saña de su parte y que tendrá que responder porque está violando la ley y la jurisprudencia de la Corte. La regla de este negocio de la política es no meterse con la familia. ¿Qué culpa tienen la mamá y el papá de que Emilio sea perseguido? Hay presunción de inocencia…, es claro que es una venganza”, expresó.
Fuente: AGENCIAS