San Luis Potosí, S.L.P. — La docente denunciada por una madre de familia por presuntas afectaciones hacia su hijo negó que exista un caso de bullying o maltrato dentro del grupo del jardín de niños, y aseguró que se ha brindado atención constante a las inquietudes de la madre desde el primer momento.
“Como educadores, hemos atendido las inconformidades de la madre que ha manifestado diversas preocupaciones relacionadas con su hijo. No se trata de un caso de bullying; él forma parte del grupo y se le ha brindado atención como a todos los demás alumnos”, expresó la maestra en entrevista con El Sol de San Luis.
La educadora explicó que no se ha observado ninguna situación extraordinaria dentro del aula, pero ante la insistencia de la madre se le sugirió acudir con especialistas para descartar cualquier problema adicional.
“Ella se sintió ofendida por esta recomendación y ha reiterado su inconformidad con el servicio, aunque hemos implementado distintas estrategias para atenderla, como invitarla a observar al grupo y participar en actividades escolares”, indicó.
La docente reconoció que en dos o tres ocasiones el menor entró llorando al plantel, algo que calificó como normal en niños pequeños, pero negó que existan conductas de agresión o exclusión hacia el alumno.
“En este jardín trabajamos alrededor de veinte personas, y todos hemos intentado comprender y apoyar a la señora. No entendemos la magnitud de su molestia, pero ha decidido llevar su inconformidad a medios de comunicación, pese a que fue atendida por la inspectora de zona y personal del SEER”, añadió.
La maestra detalló las acciones implementadas en el plantel para atender las preocupaciones de la madre de familia:
- Reuniones con la dirección escolar, la inspectora y personal del SEER.
- Actividades y planeaciones para trabajar emociones y acuerdos en el aula.
- Observación constante por parte de directivos y asesores técnico-pedagógicos.
- Pláticas con el DIF dirigidas a padres de familia.
- Designación de un asistente educativo para el grupo.
Finalmente, la docente reiteró que en casi dos meses de seguimiento no se ha detectado ninguna irregularidad ni caso de agresión, y que el plantel continuará abierto al diálogo con las madres y padres de familia para garantizar el bienestar de todos los alumnos.
