San Luis Potosí, México.– Un grupo de maestros jubilados y pensionados tomó este jueves las instalaciones de la Sección 26 del SNTE, en exigencia del pago del bono correspondiente al Fondo de Previsión Social y Retiro 26 (Fopresyr), del cual —afirman— se les adeudan 27 meses. Los afectados aseguran que las autoridades sindicales justifican el incumplimiento argumentando que el fondo “está quebrado”, situación que rechazan y que atribuyen a un posible desvío de recursos.
Desde las nueve de la mañana, los manifestantes colocaron lonas en el exterior del edificio sindical para denunciar a quienes administran el fondo y exigir una auditoría externa que esclarezca el manejo de los recursos. Más tarde, ingresaron al inmueble y montaron casas de campaña dentro y fuera del edificio. No descartaron bloquear carreteras si no reciben una respuesta inmediata, pues el bono representa un complemento esencial en su etapa de jubilación.
Los inconformes explicaron que su objetivo es presionar a las autoridades sindicales para que paguen los adeudos, cansados de más de dos años sin respuestas claras. Norberto Soto Hernández, uno de los afectados, señaló que el adeudo ha crecido porque el sindicato paga una mensualidad de manera esporádica para luego dejar de cubrir varias, lo que ha generado un déficit estimado en 197 millones de pesos.
El Fopresyr beneficia a cerca de 4 mil 900 trabajadores jubilados en todo el estado. Incluye dos modalidades de apoyo: una capitalización única de alrededor de 100 mil pesos al momento de la jubilación y una complementaria de 3 mil pesos mensuales. En ambos casos, hay maestros que no han recibido absolutamente nada desde su retiro.
Los manifestantes acusan que bajo la dirigencia de Juan Carlos Bárcenas, los pagos se volvieron aún más irregulares: al inicio recibieron dos meses, pero con el tiempo el adeudo creció hasta alcanzar los 27 meses sin cubrir.
La situación, dijeron, se agrava para quienes enfrentan enfermedades o tratamientos costosos, como un jubilado que requiere diálisis cada tercer día y que, pese a su condición delicada, no ha recibido los apoyos que por derecho le corresponden. Además, los afectados deben suspender trámites personales, citas médicas o gestiones en el ISSSTE para sostener el plantón.
A los adeudos del Fopresyr se suma un bono navideño de 2 mil pesos, antes otorgado anualmente por el Gobierno del Estado. El correspondiente a 2023 fue pagado hasta mayo de este año, y el de 2024 continúa pendiente, lo que dejará nuevamente dos pagos acumulados en diciembre.
Los jubilados anunciaron que mantendrán la toma del edificio hasta recibir una solución concreta y verificable sobre el destino de los recursos del fondo.
