San Luis Potosí, México. — Tras los hechos violentos registrados en los últimos días, las autoridades estatales consideran que el aumento de agresiones podría ser una reacción de los grupos criminales frente al refuerzo de operativos de seguridad desplegados en la entidad.
En semanas recientes se han documentado episodios como el asesinato de un agente de la Guardia Civil Estatal (GCE), reportes sobre presuntos enfrentamientos en Villa de Reyes y, este miércoles, un posible atentado contra un directivo del Centro de Reinserción Social de La Pila.
El gobernador Ricardo Gallardo Cardona señaló que los móviles exactos serán determinados por la Fiscalía General del Estado, aunque no descartó que estos hechos estén vinculados con la presión ejercida por el Gobierno para desarticular células delictivas.
“Los grupos criminales están muy dolidos por todos los operativos que se han estado haciendo. Se está terminando de limpiar San Luis Potosí, y obviamente esto tiene repercusiones”, declaró.
El mandatario insistió en que esta es solo una interpretación preliminar y que cada caso podría tener motivaciones particulares. Aun así, reiteró que la administración estatal no detendrá los operativos: “Vamos a seguir, por aire y por tierra. El combate contra la delincuencia no va a parar”.
Por su parte, el secretario general de Gobierno, J. Guadalupe Torres Sánchez, negó que en Villa de Reyes haya registros oficiales de enfrentamientos armados y coincidió con la lectura del gobernador.
“La delincuencia se pone nerviosa cuando el Estado hace valer el Estado de Derecho. San Luis Potosí se ha convertido en uno de los estados más seguros, y eso ha generado el desplazamiento y atrincheramiento de los criminales. Ese es el enojo que están mostrando”, afirmó.
