En una declaración conjunta, catorce países de la Organización de los Estados Americanos (OEA), entre ellos Estados Unidos, Canadá y Argentina, rechazaron la reciente investidura presidencial de Nicolás Maduro por “carecer de legitimidad democrática”. El documento, firmado el pasado viernes, también señala la ausencia de “pruebas verificables de integridad electoral” en los comicios del 28 de julio de 2024.
Las delegaciones firmantes expresaron su preocupación por el “deterioro político, económico, social y humanitario” en Venezuela, instando a la comunidad internacional a intensificar esfuerzos diplomáticos y humanitarios para abordar la crisis en el país.
Entre sus exigencias, los países de la OEA piden al régimen venezolano restablecer el orden democrático y garantizar una transición pacífica. También hicieron un llamado al respeto de los derechos humanos, destacando las “persistentes violaciones” y expresaron su solidaridad con las personas que han debido abandonar Venezuela.
El opositor Edmundo González Urrutia, quien afirma haber ganado las elecciones presidenciales, continúa una gira internacional buscando apoyo para “regresar a Venezuela y asumir la presidencia”. González sostiene que los resultados del Consejo Nacional Electoral (CNE), que declararon vencedor a Maduro, fueron manipulados.
Los países firmantes reconocieron los esfuerzos de las naciones que han recibido a los migrantes venezolanos y reiteraron su compromiso con el pueblo de Venezuela. Además, instaron al régimen de Maduro a respetar el derecho internacional y permitir el pleno ejercicio de los derechos civiles y políticos en el país.