Al menos 40 personas murieron y otras 20 resultaron heridas este viernes durante dos ataques con armas de fuego contra dos mezquitas en la localidad de Christchurch, en Nueva Zelanda.
La primera ministra de Nueva Zelanda confirmó que al menos 40 personas han muerto y otras 20 han resultado heridas en los tiroteos contra dos mezquitas en la Isla Sur, diez de ellos en la Lindwood y otros 30 en la de Al Noor.
La jefa de gobierno describió el acto de “ataque terrorista”, tras señalar que se trata de “un acto de violencia extraordinario y sin precedentes”, en lo que calificó como “uno de los días más negros de Nueva Zelanda”.
La policía neozelandesa ha detenido a cuatro personas a las que les encontró explosivos en sus vehículos.
“Hay cuatro personas arrestadas. No nos consta que haya más implicadas pero no podemos asumir que no haya más”, dijo en rueda de prensa el jefe de la policía, Mike Bush, que evitó precisar el número de víctimas.
Señaló que los detenidos son tres hombres y una mujer, a los que encontraron artefactos explosivos en sus vehículos, y alertó sobre la posibilidad de que el incidente no esté limitado a la ciudad.
Uno de los atacantes se identificó en las redes sociales como Brenton Tarrant, de 28 años, originario de Australia y de una familia obrera con ingresos bajos. Con una cámara GoPro en la cabeza, el sujeto retransmitió en directo el tiroteo, que compartió en Facebook Live.
En las imágenes se ve cómo el sujeto empuña primero un rifle, que emplea para disparar a las personas de la entrada de la mezquita, y después un arma automática, con la que lleva a cabo la mayor parte de la matanza en el interior de la mezquita.
La policía pidió a los usuarios que se abstengan de difundir las imágenes “sobrecogedoras” mientras espera que Facebook y Twitter retiren el vídeo de sus plataformas.
Varios testigos indicaron que una segunda mezquita de la ciudad fue evacuada y acordonada por la policía.
Las fuerzas de seguridad bloquearon el centro de la ciudad, situada en la Isla Sur neozelandesa, y pidió a la población a permanecer confinada en sus casas.
A través de la cuenta de Twitter, la policía aseguró que “está recurriendo a todas sus capacidades para manejar esta situación, pero el riesgo sigue siendo muy alto”.
Fuente: https://www.informador.mx