Cuba canceló ayer su participación en un plan internacional de auxilio médico en Brasil y rechazó el cuestionamiento del presidente electo del país sudamericano, el ultraderechista Jair Bolsonaro, sobre la calidad profesional de los médicos cubanos.
El Ministerio de Salud Pública de Cuba fustigó las “referencias directas, despectivas y amenazantes a la presencia de nuestros médicos” hechas por Bolsonaro, a 47 días de que el militar ultraconservador en retiro asuma la presidencia.
El presidente electo respondió ayer en Twitter que condicionó la continuidad de Cuba en el programa Más Médicos a someter a los médicos cubanos a una prueba de capacidad, a que reciban el pago completo de su sueldo en Brasil y a que sus familiares les puedan visitar. “Desgraciadamente, Cuba no aceptó”, afirmó, al tiempo que prometió asilo a los cubanos que decidan quedarse en Brasil.
El pasado 2 de noviembre Bolsonaro advirtió que está en duda que Brasil mantenga lazos diplomáticos con La Habana durante su gobierno, que inicia el próximo 1 de enero.
Indicó que mientras los médicos de otros países que están en el plan reciben salario completo en Brasil, los cubanos solo reciben 25% y el resto financia a “la dictadura” de Cuba.
El gobierno cubano indicó que “ante esta lamentable realidad”, el Ministerio de Salud “ha tomado la decisión de no continuar participando en el Programa Más Médicos y así lo ha comunicado” a la Organización Panamericana de la Salud“ y a los líderes brasileños que fundaron” la iniciativa en 2013, lo que significará el retiro de entre 8 mil y 11 mil doctores.
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