Un juez en Nueva York ordenó el viernes que el expresidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, permanezca detenido por cargos de tráfico de drogas y armas.
En una breve comparecencia judicial, Hernández respondió un par de veces al juez Stewart Aaron, de la corte del distrito sur de Nueva York, que le preguntó si le parecía bien proceder de forma virtual debido a los protocolos por la pandemia de COVID-19.
Los fiscales pidieron que Hernández permanezca detenido, algo a lo que no se opuso el abogado del expresidente, Raymond Colón. Éste dijo, sin embargo, que se reserva el derecho más adelante de pedir libertad bajo fianza.
“Al menos de momento consentimos a una orden de detención permanente, reservándonos el derecho de presentar una solicitud de fianza más adelante en el proceso”, dijo Colón, un abogado con oficinas en el condado del Bronx.
La comparecencia, ocurrida después de que el exmandatario fuera extraditado el jueves, aún sorprende a muchos debido a que Hernández era presidente de Honduras hace tan sólo tres meses y a que alguna vez fue considerado por las autoridades estadounidenses como un aliado clave en la guerra contra el narcotráfico.