El ministro de Sanidad de Francia, Olivier Véran, alertó de los “vertiginosos” números de la variante ómicron en el país y afirmó que “cada segundo más de dos franceses resultan infectados” en un país que hoy ha rebasado los 200 mil contagios.
En la comisión que examina el proyecto de ley que llevará a la vacunación en Francia a una obligación casi de facto, Véran defendió el texto porque ante “una situación inédita” como la que enfrenta el país, se necesitan medidas “inéditas”.
El proyecto convierte el actual pase sanitario en pase de vacunación, lo que obliga a las personas a estar inoculadas para poder ir a bares, restaurantes, bibliotecas, instalaciones deportivas o medios de transporte. Hasta ahora un no vacunado lo podía hacer mostrando una prueba negativa.
En Francia, un poco más del 78 por ciento de la población total -incluyendo a los menores- tiene al menos una dosis de vacuna.
Véran adelantó el parte diario de COVID-19, con unos contagios récord de 208 mil casos, sobrepasando el número de este martes, de casi 180 mil.
“Viendo estas cifras, tengo la tentación de decir que estamos en medio de un maremoto. Son cifras que dan vértigo”, apuntó. EFE
