En el transcurso de los 118 días de conflicto entre Israel y Hamás en Gaza, más de 27 mil gazatíes han perdido la vida, revela el Ministerio de Sanidad de la Franja, con un sombrío cálculo adicional de casi 8 mil cuerpos sepultados bajo los escombros. Las cifras, divulgadas este jueves, detallan un panorama desgarrador de la situación humanitaria en la región.
Desde el 7 de octubre hasta la fecha, el Ministerio de Sanidad ha registrado 27,019 personas fallecidas y 66,139 heridas. Las últimas 24 horas sumaron 118 nuevas muertes y 190 heridos, mientras que la portavoz del Ministerio, Ashraf al Qudra, denunció la difícil situación de “numerosas víctimas bajo los escombros y en carreteras”, con impedimentos para la llegada de ambulancias y equipos de protección civil debido a la ocupación israelí.
La agencia oficial palestina Wafa informó sobre decenas de muertes y heridos en bombardeos y disparos de artillería y misiles israelíes en diversos sectores de Gaza. La ciudad de Gaza, en particular en los barrios Rimal y Tal al Hawa, ha experimentado dificultades para que las ambulancias lleguen a las zonas afectadas.
La situación se agrava en el oeste de Gaza, donde aviones de ocupación israelí bombardearon casas en el barrio de Zaytun, resultando en la pérdida de vidas civiles y numerosos heridos, según informó la agencia Wafa.
En el centro del enclave, ataques aéreos israelíes afectaron viviendas familiares en el campo de refugiados de Nuseirat y en la ciudad de Deir al Balah. La ofensiva israelí se concentra especialmente en Jan Yunis, asediando hospitales y generando preocupación por la salud de la población.
La armada israelí también ha disparado contra las costas del sur de Gaza, en las áreas de Al Wusta y Rafah, donde se han registrado bombardeos aéreos en terrenos baldíos en la frontera con Egipto.
En Rafah, más de 1 millón de gazatíes, casi la mitad de la población total de la Franja, se encuentran evacuados y hacinados, propiciando la expansión de enfermedades contagiosas. La ofensiva terrestre del Ejército israelí, iniciada a finales de octubre, ha resultado en 224 bajas en las filas israelíes, la cifra más elevada desde la guerra de Yom Kipur en 1973.
La guerra, desencadenada por un brutal atentado de Hamás en suelo israelí el 7 de octubre, ha cobrado la vida de más de mil 200 personas, incluyendo 330 soldados y 60 policías, además de 253 secuestrados, de los cuales 132 aún permanecen cautivos. La región enfrenta una crisis humanitaria sin precedentes, exigiendo un urgente llamado a la paz y la intervención internacional.