En medio del quinto día de intensos enfrentamientos desencadenados por el sorprendente ataque de la milicia islamista Hamás, la violencia persiste en la región. Cohetes lanzados desde Gaza han alcanzado ciudades israelíes, incluyendo Ashkelón y Tel Aviv, mientras que los cazas israelíes han continuado bombardeando implacablemente la Franja de Gaza, que se encuentra aislada y sin suministro de electricidad ni combustible.
Las alarmas antiaéreas han sonado a lo largo del día en áreas cercanas a la Franja de Gaza, llegando incluso al centro de Israel, como Tel Aviv. En un incidente que resalta la gravedad de la situación, un cohete impactó en el Hospital Barzilai de Ashkelón, situado a tan solo 10 kilómetros al norte de la frontera con Gaza, causando daños materiales. En el mismo hospital, equipos de emergencia han tratado a 12 pacientes, seis de los cuales presentaban heridas leves por metralla, mientras que los demás sufrían de síndromes de ansiedad, según informa Maguén David Adom, el servicio de emergencias médicas israelí.
Simultáneamente, los bombardeos aéreos israelíes contra la Franja de Gaza han continuado “a gran escala”, como lo han confirmado las fuerzas armadas israelíes y testigos en la región. Entre los blancos atacados se encontraba la Universidad Islámica de Gaza, la cual Israel alega que era utilizada para entrenar expertos en espionaje militar y para el desarrollo y producción de armas, así como para recaudar financiación para la organización islamista, según un comunicado del Ejército.
En un ataque aéreo de precisión, se logró la destrucción de todas las instalaciones de esta red de tecnología avanzada, dificultando así los intentos de Hamás de rastrear los movimientos de aeronaves israelíes.
Los continuos bombardeos de los últimos días han dejado una devastadora estela de destrucción, con más de 1,055 personas muertas y más de 5,000 heridas, además de la completa demolición de más de 500 edificios residenciales y tres escuelas, de acuerdo a las autoridades en Gaza.
Hoy, un ataque aéreo israelí contra una ambulancia resultó en la trágica muerte de cuatro paramédicos y la destrucción del vehículo en el que se desplazaban, como informa la agencia palestina Wafa. La situación en la región sigue siendo motivo de grave preocupación, y los esfuerzos por alcanzar un alto el fuego siguen siendo esquivos en medio de esta crisis en curso.