Hospitales en al menos cinco estados de Estados Unidos han reinstaurado el uso obligatorio de cubrebocas tanto para pacientes como para el personal médico, debido al aumento de contagios de COVID-19, gripe y otras enfermedades respiratorias.
California, Illinois, Maryland, Nueva York y Massachusetts son algunos de los estados donde los centros de atención médica han implementado esta medida. Incluso el grupo hospitalario Johns Hopkins, uno de los más grandes de Maryland, notificó a sus pacientes mediante correo electrónico sobre la obligatoriedad del uso de mascarillas.
El resurgimiento de contagios ha llevado a esta decisión, pero la dificultad para medir el alcance exacto se ve reflejada en la falta de recolección de datos en muchos estados. Actualmente, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) son la única entidad federal que continúa publicando cifras sobre el impacto del virus.
Según los datos más recientes de los CDC, en la semana del 9 de diciembre de 2023, se registraron 1,614 muertes por COVID-19 en Estados Unidos. Aunque estas cifras son significativas, son inferiores al récord de 25,974 muertes registrado en la semana que terminó el 9 de enero de 2021. Además, la gripe ha sido la causa principal de 163 muertes en la misma semana.
Desde que el virus llegó a Estados Unidos, más de 1.1 millones de personas han perdido la vida por COVID-19 en el país, una cifra proporcionalmente superior a la de otros países desarrollados, según los CDC. La reinstauración del uso de cubrebocas busca frenar el avance de las enfermedades respiratorias y proteger a la población vulnerable.
