La organización Human Rights Watch (HRW) se dirigió hoy a los presidentes de Brasil, Colombia y México, expresando su preocupación por las propuestas para resolver la crisis en Venezuela. En una carta firmada por Juanita Goebertus Estrada, directora de la División de las Américas de HRW, se señala que repetir las elecciones presidenciales sería una “burla” y que conceder una amnistía general violaría el derecho internacional, afectando los derechos de las víctimas de atrocidades.
HRW critica específicamente las propuestas de Luiz Inácio Lula da Silva, Gustavo Petro y Andrés Manuel López Obrador, que incluyen la repetición de elecciones y confiar en el Tribunal Supremo venezolano. La organización enfatiza que una negociación “creíble” entre todas las partes es esencial para proteger los derechos humanos en el país.
La carta también menciona la “represión gubernamental” que ha seguido al anuncio de resultados electorales por parte del Consejo Nacional Electoral (CNE). Según HRW, se han recibido informes creíbles sobre la muerte de 23 manifestantes y transeúntes, así como un miembro de la Guardia Nacional Bolivariana, en el contexto de las protestas. Además, se ha documentado una “oleada de detenciones arbitrarias” que ha afectado a cerca de dos mil personas, incluidos menores y discapacitados.
A pesar de reconocer los esfuerzos de los gobiernos de América Latina, Europa y Estados Unidos para garantizar el respeto de la voluntad popular, HRW discrepa con la propuesta de Brasil y Colombia de celebrar nuevas elecciones. La organización sostiene que repetir las elecciones debido a la negativa del gobierno de Nicolás Maduro a aceptar los resultados sería una violación de principios democráticos fundamentales.
HRW también elogia la decisión de los presidentes de no reconocer la victoria de Maduro hasta que se difundan las actas desglosadas por mesa de votación, como exige el fallo del Tribunal Supremo. La organización insta a estos gobiernos a exigir una verificación independiente de los resultados electorales.
Respecto a la propuesta de una “amnistía general”, HRW reafirma que los gobiernos tienen la obligación de investigar y perseguir graves violaciones de derechos humanos. La Misión de Naciones Unidas para la Determinación de los Hechos sobre Venezuela ha documentado serias violaciones en el país, y HRW sostiene que es crucial priorizar la judicialización de los máximos responsables de atrocidades.
