India registró 352 mil 991 nuevos contagios este lunes, la cifra diaria más alta en todo el mundo desde que comenzó la pandemia, para un total de 17 millones 313 mil 163 casos positivos.
Estos niveles se dan en medio de la escasez de vacunas en un país, cuyos registros podrían provocar que se prolongue la peor crisis sanitaria del mundo.
India se está quedando sin vacunas justo cuando una nueva ola de infecciones de COVID-19, lo que complica el plan del primer ministro Narendra Modi de vacunar a la fuerza laboral del país.
En el centro financiero de Mumbai, la vacunación comenzó más tarde de lo habitual este lunes cuando los viales se agotaron. La ciudad tiene suficientes existencias para los próximos tres días, pero se les dará prioridad a quienes reciban su segunda dosis, dijo el municipio en un comunicado.
Es probable que esta escasez se agudice a partir del 1 de mayo, cuando el gobierno planea permitir que los adultos entre 18 y 45 años reciban la inyección, además de los mayores de 45 que son elegibles actualmente.
India todavía está luchando por recuperarse, ya que los hospitales abrumados se quedaron sin tanques de oxígeno, mientras que los nuevos casos han aumentado a alrededor de 3.5 millones desde mediados de abril. La producción de vacunas también se ha visto afectada por el almacenamiento de ciertas materias primas esenciales por parte de Estados Unidos.
En un tuit el domingo, el presidente Joe Biden señaló que la ayuda está en camino. Los ingredientes necesarios para producir Covishield, la vacuna de la Universidad de Oxford-AstraZeneca fabricada en India, han sido identificados y “estarán disponibles de inmediato”, dijo Emily Horne, portavoz del Asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, en un comunicado.