El juicio penal contra el expresidente Donald Trump (2017-2021) está a punto de concluir esta semana con los alegatos finales de las partes, que comenzarán mañana martes tras seis semanas de testimonios de veintidós testigos.
Los alegatos finales son la última oportunidad para que la Fiscalía y la defensa convenzan a las doce personas del jurado sobre la culpabilidad o inocencia del actual candidato a las elecciones republicanas. Trump enfrenta 34 cargos graves de falsificación de registros comerciales y, si es declarado culpable, podría recibir una sentencia que varía desde la libertad condicional hasta cuatro años de prisión.
Durante el juicio, veinte testigos de la fiscalía y dos de la defensa subieron al estrado. Los cargos contra Trump se derivan de pagos a su exabogado Michael Cohen para reembolsar el pago de Cohen a la estrella porno Stormy Daniels, presentado como un gasto legal.
Stormy Daniels detalló su encuentro sexual con Trump en 2006, pero su testimonio no añadió mucho al caso principal, que se centra en el pago irregular por su silencio. En cambio, Michael Cohen, ahora enemigo de Trump, declaró que pagó 130 mil dólares a Daniels días antes de las elecciones de 2016 y fue reembolsado por Trump.
La defensa ha intentado desacreditar a Cohen, señalando sus mentiras previas y su falta de credibilidad. Después de los alegatos finales, el jurado deberá llegar a un veredicto unánime. Si no logran consenso, el juez Merchan podría declarar un juicio nulo, lo que ocurriría si no se alcanza un veredicto conjunto.
El desenlace de este juicio, que ha captado la atención tanto en Estados Unidos como a nivel internacional, es crucial para el futuro político de Trump y podría influir significativamente en las próximas elecciones.