La reina Isabel II celebra hoy su cumpleaños número 94 en medio de la pandemia, lo que la ha obligado a celebrar un año más de vida de forma silenciosa, sin disparos de honor, como dicta la tradición, y en el palacio de Windsor.
Este lugar es su hogar temporal, con la compañía de su esposo, quien está a unos meses de cumplir 99, y bajo el cuidado de sus médicos, la reina se mantiene fuera de sus espacios regulares para evitar que el contagio de COVID-19 sea un determinante en su salud, sobre todo después de que su hijo, el príncipe Carlos, diera positivo a la enfermedad.
Las felicitaciones serán exclusivamente en forma digital o por teléfono y sus hijos, nietos y bisnietos no deberán visitarla por temor a que sean portadores de la enfermedad y afecten la salud de los monarcas, en un Reino Unido donde hasta el primer ministro Boris Johnson se contagió y ha tenido que pausar sus actividades.
En un homenaje a la reina que más tiempo ha permanecido en el trono del país, el palacio de Buckingham realizó una complicación audiovisual con fotografías y videos de cómo era la vida de la entonces princesa en su infancia, antes de siquiera imaginar que se sentaría en el trono.
Previo a ser nombrada reina, Isabel II era hija del príncipe Albert, que fue coronado por su hermano Eduardo VIII que abdicó en su favor para continuar su relación con Wallis Simpson, quien no era aceptada por la corona.
Albert fue nombrado rey George VI y se mantuvo en el poder de 1936 a 1948, en su mandato vivieron años complejos, en los que su país se presentó en batalla durante la Segunda Guerra mundial.
George VI falleció a los 56 años y dejó a su hija mayor en el trono. La coronación de Isabel II fue la primera televisada y desde entonces la reina se mantiene en el cargo como asesora de asuntos políticos y determinante en algunos temas de interés del gobierno, aunque siempre alejada de las cámaras al momento de expresar opiniones sobre candidatos o posturas específicas.
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