La oposición venezolana, agrupada en la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), ha logrado superar sus divisiones internas y se prepara para las elecciones presidenciales del próximo domingo, convirtiéndose en un desafío significativo para el presidente Nicolás Maduro, quien busca extender su mandato por seis años más. A lo largo de los veinticinco años de chavismo, la unidad de la oposición ha sido frágil, marcada por peleas internas y diferencias sobre cómo enfrentar al régimen.
En años recientes, la oposición exploró alternativas fuera del ámbito electoral, como las protestas de 2017, que fueron reprimidas por las fuerzas de seguridad. Sin embargo, la inminente elección del 28 de julio ha motivado a los líderes opositores a dejar de lado sus diferencias y unirse en una estrategia electoral. Según el consultor político Giulio Cellini, “todos coincidieron, por fin, en la ruta electoral”.
Las encuestas apuntan a Edmundo González Urrutia, candidato de la PUD, como el favorito para ganar las elecciones. La oposición enfrentó desafíos significativos en su proceso de selección de candidatos. María Corina Machado, quien ganó las primarias, fue inhabilitada para postularse hasta 2036, lo que obligó a la PUD a buscar alternativas. Aunque la historiadora Corina Yoris fue considerada, su inscripción fue bloqueada sin explicación del Consejo Nacional Electoral (CNE).
En medio de este panorama, Manuel Rosales, gobernador del estado Zulia, se inscribió como candidato independiente, lo que generó críticas entre líderes opositores. Finalmente, la PUD eligió unánimemente a Edmundo González Urrutia como su candidato, superando lo que podría haber sido otra fractura en la coalición.
Cellini destaca que la oposición ha tomado conciencia de la necesidad de movilizar a la sociedad para votar, afirmando que “es posible ganar a pesar de las arbitrariedades”. La experiencia de 2015, cuando la oposición obtuvo la mayoría en la Asamblea Nacional, sirve como un recordatorio del potencial que tienen si logran organizarse y movilizarse efectivamente.