El presidente Vladimir Putin afirmó este martes en conferencia de prensa que Rusia no quiere una guerra con Europa.
En conjunto con el primer ministro de Alemania, Olaf Scholz, el presidente ruso mencionó que no quiere tener una guerra con el continente europeo.
Agregó que precisamente por eso Rusia ya había presentado sus propuestas de seguridad, por lo que espera que se pueda llegar a un resultado que responda a los intereses de todas las partes.
Aunque sus demandas de la seguridad rusa, han sido planteadas a Estados Unidos y la Organización del Tratado del Atlántico Norte, (OTAN), Putin dijo que no ha recibido una respuesta constructiva, pero aún así espera poder continuar el diálogo.
Además, Vladimir Putin, subrayó que las futuras negociaciones se deben tener en cuenta estas preocupaciones de seguridad de Rusia, las que incluyen:
- La no ampliación de la OTAN hacia el este
- El rechazo al despliegue de sistemas de ataque cerca de las fronteras rusas
Dependerá de la situación para que continúe el retiro de las tropas rusas en la frontera de Ucrania
En esta misma conferencia de prensa, el presidente Vladimir Putin sobre el retiro de las tropas rusas, dijo que dependerá de la situación, para que exista un retraso de sus militares en la frontera de Ucrania.
Sobre la retirada de las tropas rusas de la frontera de Ucrania, Olaf Scholz el canciller alemán, manifestó que es una buena señal, pero debe de haber más para rebajar la tensión.
Aunque afirmó que “la diplomacia no está agotada ni lejos”, ahora tienen que trabajar de forma decida y con valentía para poder llegar a una solución pacífica de esta crisis.
Además, el canciller alemán, pidió que este diálogo “no acabe en un callejón sin salida” porque sería una catástrofe para todos.
A pesar de que las tropas rusas se están retirando de la frontera con Ucrania y su presidente Vladimir Putin dijo no querer una guerra con Europa.
Ahora Canadá, quien se había mantenido un tanto fuera del conflicto, anunció que este lunes 14 de febrero, habría tomado la decisión de proporcionar armas letales a Ucrania por un importe de 5.4 millones de euros.
