Se pretende el establecimiento de una estructura sostenible de capital, continuando con su modelo de operación y con ganancias en el largo plazo, señaló en un comunicado la compañía fundada a fines del siglo XIX.
Con la petición voluntaria del procedimiento del Capítulo 11 del Código de Bancarrota estadounidense, espera un proceso de reestructuración tan expedito como sea posible y con el compromiso de reorganización en el plazo más cercano.
El mecanismo legal fue solicitado ante su elevado pasivo y la plantilla de personal la componen 89 mil empleados, lejos de los 246 mil de hace un lustro.
Los procedimientos incluyen a las tiendas Sears y Kmart, así como a sus respectivas plataformas electrónicas, las cuales se mantendrán abiertas y en operacion, precisó.
Empero, hacia el fin de año cerrarán 142 tiendas consideradas sin beneficios, que se suma al cierre de otros 46 establecimientos que ya había sido anunciados.
El actual presidente ejecutivo Edward S. Lampert deja el cargo de inmediato, aunque se mantiene como presidente del Consejo Directivo.
Sears se prepara para la quiebra; sus acciones se desploman
En su lugar operará un triunvirato compuesto por Robert A. Riecker, Leena Munjal y Gregory Ladley, además de que se formó un comité de reestructuración y se nombró a Mohsin Y. Meghji como jefe de Reestructuración y William L. Transier como director independiente.
Apenas la víspera el historiador Jerry Hancock dijo a la National Public Radio (NPR) que se trataba de una historia triste porque Sears es una institución estadunidense, en particular en los años 60 y 70 del siglo pasado.
Dijo que para muchos extrabajadores de la compañía, el declive comenzó cuando se alejó de sus raíces con la clase trabajadora, un proceso que comenzó con el periodo de prosperidad de los años 50.
El pasado miércoles, al conocerse las primeras versiones periodísticas de que iniciarían los procedimientos del Capítulo 11, las acciones de Sears cayeron 32 por ciento.
Fuente: https://www.excelsior.com.mx